Uno de los aspectos menos comprendidos —pero más frecuentes— en los niños con Trastorno del Espectro Autista (TEA) es la rigidez cognitiva , es decir, la dificultad para adaptarse a los cambios, aceptar nuevas propuestas o tolerar lo inesperado. Esto no solo afecta sus rutinas, sino también su lenguaje, su juego y su relación con los demás. 🧠 ¿Qué es la flexibilidad cognitiva? La flexibilidad cognitiva es una habilidad ejecutiva que nos permite: Cambiar de estrategia cuando algo no funciona Adaptarnos a situaciones nuevas Ver las cosas desde otro punto de vista Alternar entre tareas o pensamientos En los niños con TEA, esta flexibilidad puede estar disminuida, y por eso vemos reacciones como: Molestia ante cambios de planes Insistencia en hacer las cosas “siempre igual” Uso repetitivo del lenguaje o del juego Dificultades para compartir o turnarse Ansiedad cuando no comprenden lo que se espera de ellos 🎯 ¿Cómo se trabaja la flexibilidad en sesión? ...